La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda invertirá algo más de 106.000 euros en tres tramos del río Masma a su paso por los municipios de Mondoñedo, Lourenzá y Barreiros. La actuación se llevará a cabo en 48 kilómetros de cauce para llevar a cabo su restauración ambiental recuperando el bosque de ribera y mejorando la conectividad fluvial.

Según explicó este lunes la conselleira Ángeles Vázquez, que visitó uno de los tramos en los que se actuará en Mondoñedo, acompañada del alcalde, Manuel Otero; la directora xeral de Patrimonio Natural, Belén María do Campo; y el delegado territorial en Lugo, Javier Arias, los trabajos previstos en el Masma empezarán la próxima semana. Por un lado se recuperará la vegetación de ribera eliminando las especies exóticas invasoras y plantando autóctonas y, por otro, se mejorará la conectividad fluvial actuando en diversas presas para resolver los problemas que se detectaron.

En lo que se refiere a las presas, desde la consellería precisaron que se están elaborando las propuestas concretas para cada infraestructura, desde mejoras en los dispositivos de franqueo hasta su demolición. “Nalgúns casos a situación actual dificulta ou mesmo fai imposible o remonte dos peixes mentres que noutros trátase dun problema de mantemento, xa que as escalas producen a retención de restos de ramas e vexetación”, aclaró la conselleira.

Las actuaciones, con un plazo de ejecución estimado de un mes, se realizarán en una superficie total de 72 hectáreas en los tres municipios. También está previsto ejecutar obras de mejora en la escala de Celeiro, pero esta actuación requerirá de la redacción de un proyecto específico por lo que habrá que esperar para que empiecen estos trabajos.

MIL RÍOS. Estos trabajos se enmarcan en el proyecto Mil Ríos, una iniciativa de la Consellería de Medio Ambiente que cuenta con un presupuesto total de cinco millones de euros procedentes de fondos Next Generation y con la que aspira a mejorar 470 kilómetros de 50 cursos fluviales en las cuatro provincias para aumentar así su resiliencia y su capacidad de respuesta frente al cambio climático. Esta es una de las actuaciones más ambiciosas que llevará a cabo la Xunta, gracias a la financiación europea, para restauración y conservación de los ecosistemas.